Mes: enero 2020
La Balada de Los Discípulos Enfermos
Los Inocentes 3
Llegó el día de ajustar cuentas con aquellos que nos hicieron daño. De 3 tarjetas llegamos a la conclusión que había solamente un demonio al que íbamos a destruir. Era cierto parasito que había destruido muchas vidas y que de la noche a la mañana se volvió al negocio de la Fe. Siempre nos ha encabronado aquellos cobardes que en vez de resolver sus conflictos se escudan de la religión. Esa era la noche donde fuimos al culto a buscar problemas, mi cuerpo despues de 2 «perco» y una cervecita artesanal estaba listo para ir al culto con mis hermanos. Antes de irme a la Ciudad Cervecera sería la última estupidez que cometeríamos juntos y que mejor forma de hacerlo en un templo cuyo Líder era el mayor corrompido. Me encomendé como siempre a Chicky Starr quién a pesar de todo sigue siendo mi líder espiritual, me acicalé y me encontré con los muchachos.
¿Que puñetas vamos hacer? El riesgo de yo caer preso sin vivir el sueño americano (De las mentiras más grandes que decimos los de la diáspora) estaba latente. De momento El Canalla nos dijo «no se preocupen, ustedes me acompañan y yo me encargo». La realidad era que de los 4 que estabamos yo era el más cagao. De los cobardes no se escribe nada, pero más bien el pendejo es el que escribe. El asunto era sencillo entrar al culto dentro del templo y darle muerte, si quedaba tiempo quemar todo pa´la pinga (aunque desde ya digo que eso no pasó). Fácil ¿no? Esa noche se subió al monte del Barrio y si prendimos en fuego La Cruz del Monte. Yo dije que era bien de KKK hacer esa mierda a lo que se me contestó «que se joda, ganó Trump, puede ser cualquier penepé jincho de esos que no saben hablar inglés»; pero sabíamos que el Pastor iba a entender ya que por años fue nuestra fantasía de adolecentes de darle candela a esa cruz.
Siempre nos gustó ese monte para ir a fumar hierba cuando ninguno de nosotros se estaba quedando calvo. Siempre hablabamos de algún día producir la suficiente testosterona para tumbarla o quemarla. Ese viaje de chamaquitos escuchando música del diablo excepto uno quien siempre escuchó reguetón; claro que El Demonio de la Tinta y El Diablo en Patines han sido bien crisitanos excepto el último quién en la actualidad si se convirtió en un espécimen que habla en lenguas y nos condena al infirnos en videos. En fin, llegó la noche a ese comienzo de la navidad boricua, territorio que ha pesar de que no es estado cae nieve con cojones pero de abajo para arriba. Esa noche era la definición quizas de como viviríamos a partir de ese momento.
Llegamos todos al culto bañados, acicalados, cualquiera diría que éramos una pelota de vergüenza. Yo sabía que uno de nosotros estaba armado con una .38 y otro con un puñal, obviamente no era yo. Recuerda esa señora gorda con ese culo al cual yo le haría «brrrrrrrrrrrrrr» en esas nalgas, las cuales estaba rompiendo la pandereta de tanta adoración a Jehová. Antes de ir JJ nos dio al Titan un poco de ganya para calmarnos un chin antes del papelón, sabran que cuando llegamos el comentario de las doñas » Que peste a marihuana» a lo que JJ contesta » Así huele la libertad doñis».
El Pastor estaba hablando de la confraternización entre la familia y Dios entre gritos y pendejaces. Nunca he entendido el afán de algunos pastores de gritar todo y en medio hablar en lenguas. Titan me dice bien bajito » por eso uno no debe abusar de las drogas porque termina uno bien pendejo dando testimonio». Acierto con la cabeza y se me zafó una carcajada. Entonces llegó el punto donde el pastor invita a la gente al frente para sentir el poder de Jehová mientras le agarraba la cabeza al estilo The Great Kalhi.
Pasan 2 ó 3 feligreses del culto hasta que se para El Canalla quien a pesar de todo siempre se ganó el respeto de todos por ser el más cojonú. Recuerdo cuando El Pastor lo miró, esa cara valía un millon de pesos, en ese momento debo confezar que se me zafó un peo de esos silenciosos pero apestosos. Al Pastor se le salieron 20 gallitos diciendo » Siente el poder de Jehová» en lo que El Canalla se tira al suelo. El Pastor dice por el microfono «El tiene un demonio y lo voy a salvar» . Todo el mundo se quedó perplejo, la musica paró y todo quedó en silencio ante lo que iba a pasar. El Pastor se dobla a recogerlo y El Canalla lo abraza fuerte entonces en el oido le dijo esto:
-«Te pido PERDON porque ha pesar de que nosotros los que llamaste hermanos siempre supimos que eras un puerco te dimos nuestra amistad a pesar de ser así. De la misma manera cabrón te perdono por ser así, es tu día de suerte porque ya somos hombres de familia y no vale la pena gastar una bala en tí. Espero que Dios se apiade de tí. Antes mira quienes vinieron a verte».
En ese silencio El Pastor ve a su pequeña congregación y nos ve. En ese momento se le veía sudoroso, con mareos. Yo sabía lo que le estaba pasando, cuando llevas años dándote cantazos por encima del bigote no esperes menos que cuando te dan un choque emocional así te da un ataque cardiaco. Allí los feligreses comenzaron sus alabanzas diciendo El Pastor Fulano le sacó el demonio a ese hombre, todo tipo de comentarios acerca de sacar diablos, pendejaces y ninguno fue capaz de llamar al 911 hasta que terminó de colvulsar y se quedó tieso. ¡Que cosa más cabrona! El tipo se cagó en su madre y por cosas del destino o quizas es porque dios existe pasó esa pendejá. Todavía me soprende ese momento donde nadie se dignó a llamar a urgencias por el soponcio que le dio al cabrón. Al fin y al cabo no es que se haya cumplido a lo que fuimos hacer sino que el tipo dentro de su congregación murió como un héroe. Esa noche escuché comentarios como se salvó la vida sacando un demonio y esas vainas. La realidad era que pues por cosas del destino estuvimos en el momento y a la hora que le dio con estirar la pata. El hecho de morir como un héroe y que otro de sus lambones asumiera la gran «responsabilidad» de ser el próximo Pastor. El buitre está donde sea. Esa misma noche ya tenían sucesor. Ya ustedes saben lo que dicen «El muerto al hoyo y el vivo al pimpollo»
Crónicas de un Guardia de Seguridad 